Echando la vista atrás, y repasando la era Crosby-Malkin-Letang, lejos queda el doblete de la temporada 2015-16 y 2016-17.
De esa plantilla, solamente queda el trío estelar más Guentzel, Rust, Dumoulin, Ruhwedel y un testimonial Jarry que jugó su primer partido NHL esa temporada. Por el camino se ha perdido a jugadores (ganadores) como Fleury, Murray, Kessel y defensas como Oleksiak, Cole o Schultz. Además de especialistas como O’Sheary o Hornqvist.
Los goalies actuales Jarry y DeSmith, eran tercer y cuarto respectivamente en la lista de titularidades no hace mucho. Lo que más preocupa es que no parecen mejorar ni asegurar lo que daban los anteriores.
El cambio de General Manager a finales de enero de este año, fue un vuelco del proyecto que parecía que iba a dar un giro de timón importante de buenas a primeras. Ron Hextall (con la ayuda de Brian Burke) venía con pasión por el proyecto. El que fuera portero de los Philadelphia Flyers, pasó directamente a scouter para los Broad Street Bullies de manera inmediata tras colgar los guantes.
Unos años después fue vicepresidente y asistente al manager para Los Ángeles Kings, ganando una Stanley Cup con los Kings y siendo, además, el General Manager de los Manchester Monarchs, el afiliado king de la AHL. Cerrando el círculo perfecto volviendo a “su casa” para ser el GM de los Flyers del 2014 al 2018, años en los que tuvo que lidiar con trades envenenados y decisiones importantes en el draft que le llevaron a seleccionar a varios jugadores que hoy nos suenan bastante: Travis Konecny, Nicolas Aube-kubel, Oskar Lindblom, Ivan Provorov, Carter Hart y Joel Farabee entre otros.
¿Nada mal, verdad?
Dejando a un lado el pasado y los despachos, sigue habiendo varios frentes a controlar:
- Contratos de Malkin y Letang
- La titularidad en la portería
- Los refuerzos para formar la 4ª línea
Money talks, folks
34 primaveras para Letang y 35 para Malkin. Llegaron juntos en la temporada 2006/07 como rookies y desde aquel entonces, su periplo es de ensueño, bordado con tres Stanleys en el 2009, 2016 y 2017. Agradecimiento eterno a las dos grandes espadas de Crosby. Eso no cambia que sus nuevos contratos deberían ser a la baja.
Dumoulin le ha tapado muchas subidas excesivas a Letang, y esperemos que Marino y Matheson no encajen tantos goles como el año anterior. Pettersson recae a tercera línea defensiva con el joven Friedman, una moneda al aire.
No hay una defensa muy encuadrada como para no pensar en un futuro refuerzo…así que ése dinero va a ser importante el día de mañana.
Malkin ha sido uno de los mejores centers de la liga (y uno de los mejores en powerplay), 4º mejor de los jugadores en activo con 153 goles y 265 asistencias en superioridad. Estas cifras le han llevado a ser el forward mejor pagado del equipo (sí, más que Crosby) con 9,5M$ por temporada. Y el defensa (lógicamente) ha sido el defensa mejor pagado de los Pens con 7,5M$.
Siendo One Club Man ambos jugadores, dudo que no lleguen a un acuerdo, y los nuevos contratos deberían dar algo de aire para reforzarse de cara a la 2022/23 sin hipotecarse en las renovaciones, dado que tras ellos, el mismo año vienen UFA’s y RFA’s de Kapanen, Rust, Carter, Aston-Reese, Rodrigues, Heinen, Lafferty, Ruhwedel, Friedman y DeSmith…
La gestión de Rutherford con los contratos ha ido exageradamente enfocada a exprimir la ventana de campeonar con la mejor versión de Crosby, Malkin y Letang. Con la consecuencia de que ahora su sustituto se encuentra con doce contratos (de los cuales 7 participan muchísimo en rotación) que deben ser negociados calculadora en mano. Un jardín importante para Hextall.
¿Jarry o DeSmith?
Parecía un buen movimiento dejar escapar a Marc-Andre Fleury. De la misma manera que Murray apuntaba a ser el gran sustituto y comerse el mundo. Así como se confió en Jarry para que llenara el vacío (físico y existencial) que dejó Murray tras un año lejos de su mejor nivel. Y el cuarto en discordia, es el que a día de hoy más buenas sensaciones ha dejado en la mayor parte de partidos que ha disputado; Casey DeSmith.
Jarry sentó a Murray en la bubble, nadie dudaba de que había dado un golpe encima de la mesa. Hasta que le tocó calzarse el jersey de Goalie1. Ser el titular “indiscutible” no le hizo ningún bien, todo eran dudas, rebotes, errores no forzados y goles encajados de forma errante. Aun así, Tristan Jarry acabó la temporada con unas estadísticas más que dignas: 2,75 goles encajados por partido y un porcentaje de salvadas del .909%
Por su parte, DeSmith salió con ventaja al ser el back-up recibiendo muy pocos focos. 2,54 goles encajados por partido y un .912% le hicieron discutirle el puesto a Jarry desde los primeros encuentros. Simplemente esperando y disfrutando su momento.
Para esta temporada, se espera que Jarry debe dar un paso adelante, 25 años (sigue siendo muy jóven) y un futuro por delante por escribir. Contando con un G2 como DeSmith, Sullivan no debería temblarle el pulso a la hora de alternar portería si lo cree conveniente.
¿Quién jugará en 4ª línea?
Y la parte más divertida, el juego de los cromos, las tarjetas están puestas en muchas de las posiciones del depth chart del equipo de Pensylvania. Sabiendo que seguramente Malkin se vaya a LITR (Long Term Injury Reserve) y dejando a un lado que Hextall se ahorrará su sueldo, Sullivan sigue contando con tres buenos centers para el medio de sus líneas como son Crosby (1), Carter (2) y Blueger (3). Por las bandas parece claro que seguiremos viendo a Guentzel (1) y a Zucker (2) por el ala izquierda, y a Rust (1), Kapanen (2) por la derecha.
Esto nos deja con 7/9 ocupadas para las primeras tres líneas ofensivas del equipo.
Además, es sabido que Zach Aston-Reese (renovado por una temporada a 1,75M$) espera disfrutar de salud para mostrar su talento y jugar fijo en 3L. Está por ver si no prefiere usarlo de revulsivo y de push en el forecheck con la 4L.
De la misma manera que los fichajes de Brock McGinn y Danton Heinen en principio, deberían estar en el bottom 6.
Con esto ya tendríamos 10 de los 12 jugadores ofensivos del equipo. Por lo tanto, y sabiendo el estilo de juego de Sullivan.
Podríamos apostar que McGinn se quedará el rol de Tanev (Seattle Kraken), así que lo ideal sería juntarlo con Aston-Reese y generar junto a Blueger un poder defensivo para la presión descomunal. Y Heinen quedaría colgado con otros dos jugadores. Está listado como ala izquierda, así que veremos si la opción es Chaput, O’Connor o Zohorna (que parte con ventaja) en el centro, y ver quién se hace con el puesto de ala derecha, si Lafferty o Rodrigues (el que más números tiene).
Concluyendo, la duda en la portería es la clave más importante a resolver viendo la solidez que tienen en el top6 ofensivo. Una vez haya tranquilidad y confianza bajo palos, se podrá analizar y ajustar de forma más concreta las sinergias y automatismos a mejorar en el juego. Una ventana más para intentar ganar con Sid the Kid.
¿Tiene Crosby plantilla para conseguirlo?
Habrá que estar atentos.