La temporada anterior, la 2001/02, los Ottawa Senators terminaron terceros en la división Noreste con un registro de 39-27-9-7 para lograr 94 puntos. No obstante, el equipo liderado por Alfredsson con 71 puntos no superó la primera ronda de las eliminatorias y cayó inesperadamente ante los Philadelphia Flyers en cinco partidos.
En verano, Ottawa realizó tres traspasos y una firma crucial para el éxito de la siguiente campaña. Los Senators adquirieron a Josef Boumedienne, Brian Pothier y Peter Schaefer. Combinados, los tres totalizaron 89 partidos y 29 unidades aquel curso. Así, la transacción más importante fue la renovación de Alfredsson, capitán, a un contrato de dos años.
Para un conjunto que, supuestamente, tenía todo de cara, el éxito sobre el hielo no se trasladaba a la franquicia fuera de él. Los Senators se enfrentaban a una deuda de 360 millones de dólares favorable a la NHL, al Banco Imperial de Comercio de Canadá (CIBC) y al banco FleetBoston Financial, así como la obligación directa sobre el Coral Centre. Con todo, la entidad se declaró insolvente el 9 de enero de 2003.
Meses después, en agosto, el magnate farmacéutico Eugene Melnyk compró los Senators por alrededor de $127,5 millones, una parte por el equipo y otra por el pabellón. Pese a las carencias económicas, la inestabilidad en la propiedad y la retención de pagos, Ottawa se centró en su juego sobre el hielo y pudo competir en una de las mejores temporadas de su historia.
El cuadro capitalino lo tenía todo. Construido a partir de su capacidad para formar cuatro líneas seguras, todos excepto tres jugadores anotaron al menos un punto. El poder goleador era evidente y los Senators terminaron primeros en la Conferencia Este con 263 goles a favor. Marian Hossa lideró la plantilla con 45 goles.
Como es de esperar, la mejor temporada de una franquicia queda marcada por una notable cantidad de plusmarcas del propio club. Entre ellos, Hossa empató el récord del triplete más rápido, en 7:05 frente a los extintos Atlanta Thrashers. Asimismo, Ottawa aguantó 244:47 seguidos sin encajar y encadenó seis victorias fuera de casa, ambos mejores registros del equipo.
Pese a las carencias económicas, la inestabilidad en la propiedad y la retención de pagos, Ottawa se centró en su juego sobre el hielo y pudo competir en una de las mejores temporadas de su historia
Muchos creen que los equipos exitosos llegan como resultado de firmar al nombre más importante en la fecha límite, pero este conjunto refuta esa supuesto. Durante el ejercicio 2002/03, los Senators cerraron una serie de traspasos que no influyeron mucho en la pista o en los resultados, al menos ese año. Las ocho incorporaciones totales, entre ellas Bryan Smolinski y Vaclav Varada, acumularon 16 puntos en la regular y 15 en las eliminatorias.
Ottawa entró a los playoffs como favorito y se esperaba que barrieran a los New York Islanders, octava siembra, en la primera ronda. No obstante, los Isles sorprendieron con un triunfo en el primer encuentro y los canadienses tuvieron que esperar al quinto partido, en la capital del país, para definir la serie.
En la segunda ronda, los Senators se citaron con los Flyers. Los primeros cuatro partido no vieron a ningún equipo ganar dos partidos seguidos, sino que los conjuntos se repartieron los choques en casa y fuera. A partir de ahí, Ottawa se acordó de su dominio goleador, anotó cinco en el quinto partido y cerró la eliminatoria a la primera con los mismos tantos a favor en el sexto duelo.
Los Sens chocaron contra los New Jersey Devils en la esperada final de la Conferencia Este. Los primeros dos partidos de la serie, ambos en Ottawa, terminaron con una victoria para cada equipo. Los locales ganaron el primero merced a un gol en la prórroga de Shaun Van Allen, pero Martin Brodeur brilló en el duelo posterior con 30 de 31 disparos detenidos. Seguidamente, los Devils continuaron su buen juego en casa y ganaron el tercer y cuarto encuentro.
Al borde de la eliminación en su primera final de la Conferencia Este, los Senators respondieron para ganar el quinto y sexto duelo. Finalmente, en el séptimo y decisivo emparejamiento, la racha histórica llegó a su fin y Ottawa cayó a manos de los Devils tras caer por 3 a 2.
La temporada 2002/03 de los Senators fue la primera experiencia de éxito en la postemporada para los aficionados de Ottawa. El éxito en la temporada regular envió el trofeo del Presidente a una vitrina canadiense desde los Calgary Flames de la 1988/89. Mientras que la campaña no terminó con el Santo Grial del hockey entre manos, el equipo dio prosperidad a sus aficionados, una esperanza que tardó en sentirse unos pocos años. Pero eso es otra historia.
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