El draft de 2005 fue uno de los más interesantes de la historia reciente de la NHL, no en vano tras el número uno conseguido por Alex Ovechkin en 2004, la expectación era máxima para ver si el de 2005 iba a deparar un draft de tanta calidad. Y lo fue, vaya que si lo fue.
Ese draft de 2005 nos legó un número uno que, como Ovi, ha sido legendario: Sydney Crosby. Fue el inicio de una bonita rivalidad entre dos verdaderas bestias de este deporte. Pero, además, el de 2005 fue un draft donde hubo mucha calidad con jugadores que o bien se mantienen en activo o bien han estado en activo hasta hace poco tiempo. Anze Kopitar, Marc Staal, Jack Johnson, Carey Price, Tuukka Rask, TJ Oshie, Kris Letang, Jonathan Quick, Perttu Lindgren… y nuestro protagonista, el número 2 de aquel draft: Bobby Ryan.
La vida deportiva de Ryan comenzó en el Owen Sound Attack canadiense de la OHL. En el equipo de Ontario, el jugador nacido en Nueva Jersey militó en la temporada 03-04, 04-05, 05-06 y la 06-07. En la primera disputó 65 partidos y se fue hasta los 39 puntos, en la segunda, la que le permitió ser elegible en el draft, participó en 62 encuentros y se fue hasta los 89 puntos. Este ala derecha tuvo una notable carta de presentación para la NHL aunque en un primer momento se mantuvo en el Owen Sound Attack con quienes disputó la temporada 05-06 y firmó 95 puntos en 59 partidos. El ala derecho disputaría los playoffs de la AHL con los Portland Pirates ese mismo año. En esa primera experiencia con los Pirates participó en 19 encuentros y consiguió 8 puntos. En el curso siguiente disputó 63 partidos con Owen Sound Attack y consiguió 102 puntos, y también jugó en 8 encuentros con los Pirates de Portland y se fue hasta los 9 puntos.
En la 07-08 aterrizó en la NHL de la mano de los Anaheim Ducks para disputar 23 encuentros en los que se fue hasta los 10 puntos. También jugó en los Portland Pirates de la AHL y se fue hasta los 48 encuentros sumando 49 puntos. El curso siguiente militó en los Iowa Chops con quienes disputó 14 encuentros y consiguió 19 puntos. Tras ello disputó 64 encuentros con los Anaheim Ducks logrando 31 goles y 26 asistencias.
Establecido ya como jugador de la NHL, en la 09-10 jugó 81 encuentros para los Ducks consiguiendo ver portería en 35 ocasiones y sumando 64 puntos. Registros que superó en la 10-11 cuando se fue hasta los 82 encuentros con 34 goles y 71 puntos. Su nivel de puntos se vio mermado en la 11-12 ya que en 82 partidos hizo 57 puntos. Al año siguiente, el del lockout, jugó 46 partidos con los Ducks y consiguió 30 puntos, aunque también jugó parte de la temporada en el Mora de la liga de Suecia disputando 11 encuentros y sumando 13 puntos.
Tras aquel año se incorporó a los Ottawa Senators donde militó desde la temporada 2013-2014 hasta la 2019-2020. A nivel de partidos en la 2015-2016 fue la que más encuentros jugó con 81 mientras que la última fue la que menos con 24, el resto de temporadas estuvo por encima de los 70 partidos salvo la 16-17 y la 17-18 que se quedó en 62. A nivel de goles en su primera temporada consiguió 23 goles, su cifra más alta en los Senators, mientras que en asistencias su mejor año fue en la 14-15 cuando se fue a 36. En la 15-16 consiguió su mejor registro de puntos con los de Ottawa con 56 puntos, números algo alejados de sus mejores registros con los Anaheim Ducks.
Los highlights de Ryan en una carrera NHL con altos y bajos
Finalmente su última temporada en activo fue la 20-21, una campaña marcada por el Covid-19 y en la que jugó para los Detroit Red Wings. Disputó un total de 33 encuentros en los que consiguió siete goles y siete asistencias para acumular un total de catorce puntos. Tras ese curso acabaría por retirarse del hockey en activo con 866 encuentros disputados en la NHL, 261 goles marcados, 308 asistencias y 569 puntos. Unos registros muy buenos para ser el número dos del primer draft tras la elección de Alexander Ovechkin.