A lo largo de la historia ha habido dorsales que se han quedado grabados en la retina de las personas. El #23 de Michael Jordan, el #10 de Pelé, Maradona, Messi entre otros. El #12 de Tom Brady, el #46 de Valentino Rossi o el #24/8 de Kobe Bryant.
Si nos ponemos en clave hockeística hay muchos números mágicos en la NHL, pero sin lugar a dudas el más emblemático es el #99 de «The Great One» Wayne Gretzky. Si bien lo más común durante su etapa como jugador era ver a todos los niños y niñas llevar un #99 a la espalda, cuarenta años más tarde sigue ocurriendo, cada vez menos, pero siguen viéndose jerseys con el dorsal de Gretzky, eso sí dejando paso ya hace unos años a los #87, #97, #8,…
En clave NHL, no hay numero más mítico que el #99 lucido por el gran Wayne Gretzky
Una de las grandes curiosidades acerca de este número (#99) es que en la historia de la liga solamente lo han llevado él y otros dos jugadores más. Cabe destacar que este dato tiene algo de trampa, y es que desde el 9 de octubre del 2002, el dorsal del doble nueve se retiró para todas las franquicias, nadie más llevaría a partir de entonces, el dorsal del más grande.
Los «otros 99» de la NHL fueron:
Wilf Paiement y Rick Dudley. Paiement lució más dorsales aparte del #99, pero cabe destacar que registró un total de 356 goles y 458 asistencias en 946 partidos. Unos datos más que decentes que la mayoría de jugadores no pueden presumir. Eso sí, a diferencia de Gretzky, nunca levantó una Stanley Cup.
Por otro lado, Dudley no tuvo tanto recorrido en la NHL, 309 partidos con un total de 174 puntos. Paso más fugaz por la liga y con el mismo final que Paiement, retirarse sin levantar la copa.
Es curioso descubrir cómo el dorsal llega a las manos de Gretzky, dado que el propio jugador declaró que él era gran fan de Gordie Howe y el número que quería llevar a la espalda era el #9, pero por aquél entonces estaba custodiado por Brian Gualazzi en los Soo Greyhounds de la Ontario hockey league. Probó varios dorsales pero al final, se quedó con el #99. Luego, tuvo la oportunidad de hacerse con el dorsal que él quería, el #9, pero ya se había hecho al #99 y decidió mantenerlo.
Otro dato curioso es que en su primer partido con los Oilers (en la WHA, no en la NHL), Gretzky lució el dorsal #25.
Detrás de la figura de Gretzky ha habido mil maneras de evaluación, análisis e intento de comprender la dimensión de su imagen en la liga, difícil no ver lo inmensamente grande que fue para el crecimiento de la NHL y el megáfono que supuso para las audiencias, para llegar al punto de que retiren tu dorsal de la liga al completo, no solamente de tu equipo. En definitiva, los hechos más extraordinarios, acostumbran a ocurrirle a los más grandes y en el caso de Wayne Gretzky, no iba a ser menos.
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