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NHL

Seattle Kraken, año I

Cuando empezaba la temporada, se hablaba de si Seattle sería capaz de luchar por un spot en los playoff. Por desgracia, tras pocas semanas de competición, esta idea pasó a ser una utopía y el objetivo del equipo y la organización pasó a ser otra: encontrarse.

Ron Francis, General Manager de los Kraken tiene mucho espacio salarial (de lo poco salvable este primer curso de los Krake), contratos “importantes” que expiran esta offseason y la oportunidad para intentar acercar su plantilla a la de un equipo contender.

Echando la vista atrás, para campeonar siempre se ha girado en torno a tres figuras inamovibles: un center élite, un defensa élite y un portero top10 de la liga

Varias bajas por COVID y algunas lesiones han llevado al equipo de Seattle a no terminar de sellar el core del equipo. Su primera campaña, con un balance de 27-49-6, queda lejos de lo que muchos pronosticaron. En este caso, el ejemplo de Vegas Golden Knights pasó factura. No todos los inicios son de cuento de hadas, y en el caso de Seattle, vista la gestión de Francis en el expansion Draft del pasado mes de julio, era complicado acercarse al éxito de entrada.

ESPN NHL

McCann, Gourde y Eberle han sido -a cuenta gotas-, los líderes ofensivos del equipo, cogiendo las riendas del ataque e intentando ser punzantes y hacer daño con sus internadas. Jaden Schwartz es otro jugador que por culpa de las lesiones no ha podido ofrecer su mejor versión, pero ha dejado destellos de lo que puede sumar en un futuro lejos de las lesiones.

El ex Blue ha calcado sus estadísticas de la campaña anterior, en la que también se perdió varios partidos por lesión. Pero ha terminado el año con 23 puntos en 37 partidos, cifras que quedan muy lejos de los casilleros de los líderes de la liga, pero dejando un estilo marcado de alguien que sabe lo que es levantar la Stanley Cup. Algo importantísimo para una franquicia tan joven.

El propio McCann, se ha erigido en el líder anotador del equipo. 50 puntos con 27 goles le han dejado también como máximo goleador.

Kraken pacta por cinco años con el delantero Jared McCann
nhl.com

Era importante para él salir de Pittsburgh y encontrar un hogar en el que pudiera sacudirse la presión con la que jugó su última temporada en los Penguins. Y si algo puede proclamar la afición Kraken, es que McCann es capaz de asumir esos galones que tanto le pesaban cuando la casaca era negra y amarilla. Tras su renovación por cinco años en Seattle, ve cómo se confía en él.

Los Kraken han estado cerca de ganar muchos más partidos de los que al final han conseguido llevarse al casillero de la W. Muchos partidos se decidieron por un gol, consiguiendo competir en el tramo final de temporada y acercándose a cifras de equipo consolidado, si pudiéramos analizar los goles que encajaron en empty net debido a la corta diferencia con los rivales veríamos que competir, Seattle ha competido.

¿Qué factores deben mejorar para que estas derrotas cortas, puedan transformarse en victorias? Parte de la respuesta es sencilla: los equipos especiales.

El ataque

El Power Play de los Kraken ha sido un desastre toda la temporada. O más bien dicho, casi toda la temporada.

14,55% de acierto en PP, cuarto peor registro del año justo por detrás de Yotes, Habs y Flyers.

La llegada de Beniers resultó ser aire fresco para un Power Play atascado de los Kraken. 4 de sus 9 puntos en 10 partidos, llegaron en superioridad

Y es que la joven estrella prometedora del equipo, que jugó en la Universidad de Michigan durante toda la campaña y que recordemos, se formó en el equipo de desarrollo USA, fue llamado a final de temporada para dar sus primeros pasos en la liga. Sin hacer ruido, demostró a qué ha venido y qué es capaz de hacer. Y es que en cuestión de dos partidos, fue capaz de provocar muchas situaciones ofensivas, contraataques y peligro al lado de Donato y Eberle, terminando su primer tour particular por la NHL con tres goles, seis asistencias y nueve puntos en diez partidos.

Aquí os dejo la gráfica en la que se le ve liderando el minutaje en situación de PP del equipo de Seattle:

hockeyviz.com

No han sido un equipo con problemas de anotación extremos pero sí algo preocupantes, con 2,60 goles por encuentro se sitúan los sextos por la cola en cuanto a meter el biscuit in the basket se refiere.

Matty Beniers Shines in Debut as Seattle Kraken Fall 5-3 to Flames
thehockeywriters.com

Referente a la antes mencionada situación de superioridad, destacar que solamente han sido capaces de anotar 32 goles en PP en 82 partidos, superando a Flyers y Coyotes. Lejos de los 67 que han anotado los Avalanche o los 65 de los Blues -sí, los Blues-, o los 64 de los Panthers.

Pero de todo hay que sacar algún brote verde, y en este caso, el ataque de los Kraken ha encontrado luz en la oscuridad en la línea de Schwartz. Junto a él, Wenneberg y Eberle han sido capaces de poner el nombre de Seattle en lo más alto de la clasificación de Expected Goals % de la liga. Por delante de nada más y nada menos que la línea de Marchand-Bergeron-Pastrnak o la de Bunting-Matthews-Marner etc.

Si os fijáis, no es una línea que haya coincidido los 82 partidos, y como ellos, muchos de los que salen en la parrilla. Pero es importante para el futuro kraken que este tipo de acciones no pasen desapercibidas.

moneypuck.com

En este ataque, destacar por último los destellos de calidad que mostraban Jarnknok y Appleton, pero que fueron traspasados a Flames y Jets respectivamente.

La portería

Seattle invirtió mucho en portería, no olvidemos los seis años a razón de 35.4 millones que le firmaron a Phillip Grubauer y el back-up con Chris Driedger, que firmó tres años y 10.5 millones.

Seattle Kraken: Is It Time to Give Chris Driedger The Net?
krakenchronicle.com

Viendo la estrategia de firmas del resto del equipo, la portería -bajo mi punto de vista-, ha rendido por debajo de su coste. Tanto en general como en proporción de inversión.

Para poner perspectiva, solamente los Lightning, los Panthers y los Hurricanes han gastado más en portería.

Hay una frase que se repite mucho en el mundo del hockey, y es la de: tener un buen portero te esconde las carencias (además de darte campeonatos, otra frase mítica). Pero es que tener un mal portero saca carencias, a veces, de donde no las hay.

Llegados a este punto, ¿Han sido rendimientos horribles, o el propio equipo ha “facilitado” este bajo rendimiento?

Conclusiones que salen tras ver varios partidos de Seattle (spoiler: el Expansion Draft me parece el gran culpable):

  • No tener a jugadores élite arriba ha hecho que a medida que avance la temporada, Seattle tenga que generar las ocasiones en gran parte con un sistema Behind the net con lo que tres jugadores acostumbran a estar muy profundos y eso ha generado muchas desventajas en las contras.
  • No tener a grandes carriers, jugadores que te lleven el disco de Defensive Zone a Offensive Zone, ha conllevado que gran parte de sus automatismos pasen por pases largos de la defensa a los Forwards, invirtiendo el mínimo tiempo en Neutral Zone debido a la falta de talento para subir el puck. Eso te da cero opciones a ganar el tempo del partido.
  • La forma general de jugar de Seattle es de un equipo estándar, de parte media de tabla con aspiraciones a play-off, que van teniendo mejores o peores registros y que se van colando en primera ronda. Con una plantilla algo mejorada (incluso desde el punto de partida del Expansion Draft), hubieran tenido un rendimiento mucho mayor.

Por qué como comentábamos antes, ofensivamente no han sido un equipo anotador, pero no han mostrado graves problemas para anotar (rondar los dos goles por partido hubiera sido un ejemplo grave) y en cuanto a goles recibidos, cierto es que casi han encajado 3.5, pero no han estado ni en el bottom 5. Posición 23 de 32 para ser exactos.

La defensa

Y es que podríamos llegar a valorar incluso, si la estrategia que han seguido los Kraken durante esta primera campaña a la hora de defender, ha perjudicado el rendimiento del portero.

Si nos vamos a analizar su forecheck, vemos como durante la primera parte de la temporada (gracias a JFreshHockey), Seattle fue el quinto mejor equipo a la hora de permitir ocasiones de alto peligro al rival.

En cuanto al forecheck, Hakstol usa normalmente el 1-2-2. Siendo el primer defensor, el que decide a qué lado enviar el disco, en el que ya estará preparada la línea media para checkear e intentar robar el disco o por lo menos, cortar el contraataque. Además, los dos blueliners todavía estarían pendientes por si a estos se les escapara.

Lo bueno que tiene este sistema, es que si quieren ser más agresivos tanto en intento de robo como control en neutral zone, lo transforman en un 1-3-1 y cuatro de los cinco jugadores pueden presionar por delante de la línea roja divisoria.

SI nos centramos en la estadística mostrada en la imagen, hay varias razones por las que estuvieron ahí más de media temporada.

¿Cómo lo hicieron? Con la fórmula del perímetro. Permitiendo tiros lejanos concentrando a tres jugadores en el slot para evitar pases y tiros desde ahí.

Otro punto que les permitió esto fue el no buscar entrar en transición con el disco controlado. La mayoría de los ataques venían precedidos de despejes al fondo de la pista.

Mantener el disco a 200 pasos de nuestra portería

HaksTOL

Y como tercer punto a tener en cuenta para este éxito de mitad de temporada, fue su esquema de ataque poco flexible, que mantuvo siempre a los dos defensas arriba, protegiendo la blue line rival para evitar contragolpes. Eso sí, limitaba mucho la creación de ocasiones peligrosas para los propios Kraken también

Gente como Oleksiak, Giordano (hasta que estuvo), Dunn o Larsson han sido capaces de cuajar grandes actuaciones. Leyendo bien los ataques rivales tanto para frenarlos como para aprovechar los huecos que generan en su sistema defensivo rival. Pero a grandes rasgos, el problema más grande que tiene este equipo es que debe conocerse.

Deben coger sinergias, terminar de sentar las bases de identidad de lo antes mencionado, tanto en la forma de empezar las jugadas como de parar las del rival.

Aquí podemos ver (en Hockeyviz.com), como han sido capaces de proteger de forma muy meritoria el low y el high slot. Ejerciendo ese colapso en el centro de la propia pista para no dejar espacios al rival. Viéndose claramente como el LHD, en este caso Oleksiak, Soucy y Cholowsky, los que ocupan la parte izquierda de la pista, no han hecho una gran campaña en cuanto a desplazamiento lateral y protección de su spot.

La dupla Oleksiak – Larsson es de lo más prometedor que hay en el roster Kraken. Con minutos en el hielo y partidos a sus espaldas, van a convertirse en la L1 que hoy, con mucho trabajo por hacer, apuntan a consolidar.

Si nos fijamos en el Penalty Kill, vemos que sí que hay un problema, salvando solamente un 74,89%, Seattle se sitúa bottom 3 junto con Arizona y Montreal.

HockeyViz.com

A diferencia de situación 5VS5, en el PK vemos como Seattle sí sufre para proteger el slot. Y eso, ante cualquier rival con un PP digno, es gol. A la vista está con las estadísticas mencionadas antes.

Los “culpables” en situaciones de 4VS5 son los siguientes:

HockeyViz.com

Siendo Larsson el estandarte en Penalty Kill, jugándolos casi todos, entre él y Sheahan y Lauzon junto a Donskoi, han sido los que más minutos en inferioridad han defendido el casillero de Seattle.

En definitiva, el planteamiento de Hakstol, junto con la juventud y falta de experiencia y entendimiento entre el roster, ha llevado a que quedaran octavos en la -a priori- weak division.

Faltará ver qué movimientos nos regala Francis esta offseason y cómo se adaptarán los fichajes a una plantilla faltada de talento ofensivo. ¿Irán por ahí los movimientos?

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