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Opinión

No siempre se es el mejor

Crecer nunca ha sido fácil en general. Tampoco lo es cumplir las expectativas que pone la sociedad sobre uno mismo o cumplir las metas que uno se pone de adolescente en la vida adulta. Valorar a chavales de 17 años sobre su físico y forma de jugar al hockey para colocarles en una lista y sobre esa elección pedirles que cumplan esas expectativas que se han puesto sobre ellos, tampoco debe ser fácil.

Como todo en la vida hay gente que cumple estas expectativas y los halagos son multitudinarios por haberlo cumplido mientras que otros, aún sin sucumbir o ser nefastos, no logran cumplir esas ideas preconcebidas muchas veces de periodistas y ojeadores que intentan vivir sus sueños rotos de joven a manos de esos chavales.

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Connor McDavid y Auston Matthews son dos personas que han sabido vivir bajo esas altas expectativas. Y seamos un poco sinceros, desde que ellos entraron en la NHL es muy fácil intentar comparar sus actuaciones magnificas con las siguientes primeras elecciones del draft.

Quizás por esta razón Alexis Lafrenière y Kappo Kakko en New York no están cumpliendo todas esas expectativas que un día se pusieron en sus hombros.

Situación de los Rangers

En los últimos 10 años los New York Rangers han aparecido seis veces en los playoffs incluido su aparición en la Final de la Stanley Cup de 2014 perdiendo ante Los Angeles Kings. Pero en los últimos cinco años, su última aparición fue en 2017 donde cayeron contra los Ottawa Senators en las semifinales de conferencia.

AñoRecordResultado
202127-23-6No entran en playoffs
202037-28-5No entran en playoffs
201932-36-14No entran en playoffs
201834-39-9No entran en playoffs
201748-28-6Perdió en las Semifinales de Conferencia.

Desde entonces han sido cuatro años de no pisar los playoffs a pesar de no realizar ninguna temporada horrífica. Al ser uno de los Originales Seis nunca se ha hablado de “tankeo” por su parte, pero gracias a la lotería del Draft en estos cuatro años han conseguido muy buenas posiciones.

  • Alexis Lafrenière, primera elección del draft en 2020.
  • Kaapo Kakoo, segunda elección del draft de 2019.

Aún es pronto para tachar del mapa a ambos jugadores y pensar que no pueden llegar a ser grandes figuras en su equipo, pero es verdad que tras un par de temporadas las expectativas con ambos no son las mejores. De dos jugadores que lo hicieron tan bien antes de llegar a la NHL, se esperaba mucho más de ello.

El caso Lafrenière

Hasta la fecha, Lafrenière ha competido en 80 partidos de la temporada regular de la NHL. En ese tiempo ha anotado 17 goles y 27 puntos. Aparte de Jack Hughes, no hay ninguna primera selección del Draft en los últimos 15 años que haya salido por la puerta con unos números tan poco ofensivos.

Es cierto que los más de 13 minutos por juego de Lafrenière no lo lanzarán a las listas de los líderes ofensivos de la liga. Y obviamente no estar en la primera unidad PP tampoco va a ayudar. Sin embargo, aunque las oportunidades que se le dan no son las mejores hay que partir de la base que hay muchos aspectos de su juego que necesitan más preparación.

Errores de Lafrenière

Una de las primeras partes del juego que el jugador canadiense necesita mejorar es respecto a la zona defensiva. Tiene que mejorar la protección del puck así como su backchecking, leer correctamente cuando hay una jugada rápida o ser consciente de su colocación en el hielo.

Cuando no tiene el puck y la jugada no está centrada en él no parece jugar al mismo ritmo que todos los demás en el hielo. Particularmente al final de los shifts y en al final de los partidos.  Suele perder la postura, yendo un poco más encorvado y además su patinaje podría mejorar en esos momentos.

Si vemos este clip, Lafrenière parece que está vagando por el hielo en vez de pelear por el puck que lleva el jugador de Edmonton.

Probablemente todavía sea demasiado pronto para preocuparse por Lafrenière como prospecto, pero es hora de que el equipo cambie las cosas. El juego de Lafreniere en Juniors era más de calidad que de cantidad: disparar con eficacia, no solo a granel.

El juego de Lafreniere en Juniors era más de calidad que de cantidad

Los números sugieren que puede anotar ya que tiene una media de 5,37 tiros por cada partido. Simplemente no está disparando, y Julien Gauthier y Filip Chytil no son los jugadores que pueden cambiar eso.

¿Por qué no está disparando? Posiblemente sea factores más relacionados con lo psicológico que otra cosa pero quizás un viaje a la AHL podría ayudar a su confianza que claramente tras los números que lleva esta temporada no es la mejor.

Kaako tampoco está cumpliendo lo que se dijo de él

Lo que convirtió a Kakko en uno de los mejores prospectos finlandeses en la historia del draft de la NHL fue su habilidad para jugar hábilmente y con asertividad y agresividad, aspectos que rara vez se ve en un adolescente que juega contra hombres. Era fuerte y robusto, atacando la jugada con y sin el disco.

Al llegar a los Rangers su creatividad fue eliminada de su juego. La agresión que una vez estuvo allí, ya no estaba. A menudo fue degradado o le redujeron los minutos porque intentaba jugar al hockey con un estilo moderno y de posesión del disco, llevando el puck sobre la línea azul ofensiva para establecer una oportunidad. Si te recortan los minutos, generalmente terminas haciendo lo que te pide el entrenador, que en este caso fue atrofiar el crecimiento de un jugador joven y prometedor.

Otro factor que parece haber influido en el poco inspirador comienzo de la carrera de Kakko es la falta de un papel constante en la alineación. Específicamente en sus primeras dos temporadas, bajo la dirección de David Quinn, Kakko ha jugado con casi todos en la plantilla de los Rangers.

Igual que con Lafrenière quizás un tiempo en la AHL bajo las órdenes de otro entrenador, también le vengan bien a este jugador.

El futuro dirá

Todavía son dos jugadores jóvenes y sería un error terminar con sus carreras por un comienzo en el que no han cumplido las excelsas expectativas puesta sobre ellos. Las comparaciones siempre son odiosas, pero son inevitables y aun más en el ámbito deportivo, aun así, ambos jugadores pueden corregir sus errores y ser esas piezas vitales por las que los Rangers apostaron.

Mientras tanto está bien recordar que no siempre se es el mejor; pero es que tampoco hay que serlo. Vale con saber funcionar con el resto del equipo.

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