Durante la offseason pasada, muchos fueron los titulares que coparon las llegadas de Hamilton y Graves. Y nada más lejos de la realidad, a día de hoy podemos asegurar que ambos han estado uno -si no más- peldaños por debajo de lo esperado.
Hamilton venía de ser el productor número uno en powerplay de Carolina, y Graves formaba parte de una temible defensa ofensiva en Colorado donde su rol era clave para el funcionamiento de la máquina de percutir de Denver.
Tras jugarse casi entera la regular season tenemos a Graves y a Hamilton como el 10º y el 11º anotadores del conjunto devil
Hamilton se ha perdido partidos por lesión, pero sin ser una excusa válida, puede tener margen de duda siempre y cuando se vean mejoras en su producción. En 51 partidos ha anotado 9 goles y ha repartido 19 asistencias. Lejos de la productividad que mostró en Carolina y que le llevó a firmar un contrato en NJ por más de 8 millones al año.
Graves, por su parte, en 66 encuentros ha anotado solamente 6 goles i ha repartido 22 asistencias. Pero más allá de sus números, dato frío que debe interpretarse siempre bajo el contexto y los intangibles de los partidos, cierto es que se esperaba que su presencia en defensa fuera mucho más eficiente. Encajando estos, 3,72 goles por encuentro.
Además, aquí podemos ver cómo se ven las costuras de Hamilton en defensa, permitiendo en el lado derecho (él y Subban juegan ahí en ese lado mayoritariamente) la mayor parte de los tiros:
La nueva dupla de New Jersey
Pero lo bonito de este deporte es la alegría que despierta en la afición cualquier explosión de jóvenes talentos. Y en este punto es donde entra la dupla J&J. Jesper Bratt y Jack Hughes. El número uno y dos respectivamente en anotación del equipo. El sueco ha anotado 22 goles y ha regalado 43.Por su parte, el mediano de los HugHes lleva 26 tantos y 30 apples. Con 65 y 56 puntos se han erigido como líderes en la tabla particular de los Devs.
Y lo hacen desde el protagonismo, en primera línea (junto a Yegor Sharangovich en el LW) y con tiempo en hielo en los momentos importantes. Cabe destacar que Bratt, de 23 años, este año lleva 6 goles ganadores, cerca de los 10 de Draisaitl, líder de la liga.
Jesper Bratt llegaba a la liga drafteado por los mismos New Jersey Devils en 2016. Natural de Estocolmo, jugó en las categorías inferiores y primer equipo del AIK de Suecia. Esta es su quinta temporada completa en la liga, y la que ha servido para dar ese paso al frente que no todo jugador drafteado en 6ª ronda es capaz de dar.
En su primer año, jugó 74 partidos (sin bajar a AHL, mucho mérito) con un registro de 13-22-35. Su segunda temporada sufre una lesión y solamente disputa 51 partidos anotando 8-25-33. La temporada de la pandemia, la 2019/20, anota 16-16-32 en 60 partidos. Y ya la temporada pasada empieza a aumentar su rendimiento, con 7-23-30 en 46 encuentros.
Esta temporada lleva un promedio de punto por partido, jugando un hockey vistoso, alegre pero a la vez eficiente, algo que no siempre se da en New Jersey
Entre él y Hughes han relegado a 2ª línea a Hischier, algo que parecía impredecible dos años atrás. Y es que tras un inicio duro en la NHL como el que tuvo Jack Hughes, pocos apostaron a que seguiría teniendo la vitola de jugador franquicia que sigue asomando tras su nombre. No hay nada como levantarse tras caerse y eso Hughes lo ha hecho rápido y de forma contundente esta temporada tras dos campañas discretísimas en la liga.
El mediano de los Hughes, que se va a perder lo que queda de temporada por lesión, ha resurgido de sus cenizas, tras ser quemado por la prensa los últimos dos años. La afición le ha esperado, y ahora parece que llega para dar alegrías al equipo.
En verano ya se esperaba un resurgimiento de este tipo y así lo escribimos en NHLmania.
Un resumen de highlights de cuando Bratt militaba en Suecia con 16 años:
Aquí os dejo el gol nº 20 de Bratt en breakaway:
Otro detalle más de cómo define en 1×1 el bueno de Bratt:
Aquí os dejo el documental corto sobre Hughes:
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