No es nada fácil llegar a la NHL como número 2 del draft y mucho más si en esa misma selección uno de tus mejores amigos es elegido en el número 1. Las comparaciones, siempre odiosas, son inevitables en esta situación. Y eso fue lo ocurrió en 2007, cuando James Van Riemsdyk fue elegido en segunda posición del draft por detrás de su amigo Patrick Kane.
La edición del draft de 2007 dejó a los Chicago Blackhawks eligiendo a Patrick Kane como número uno mientras que los Philadelphia Flyers tuvieron que conformarse con la segunda posición y eligieron a James Van Riemsdyk. Por aquel entonces el ala izquierda había jugado en el Christians Brothers Academy antes de incorporarse al programa estadounidense de desarrollo del hockey hielo donde jugó como sub 17 y sub 18. Allí fue donde conoció a Patrick Kane y se hicieron muy buenos amigos.
Gracias a Van Riemsdyk y Kane, el draft de 2007 tuvo a dos estadounidenses en lo más alto
Tras haber sido elegido en el draft, Van Riemsdyk no debutó en la NHL sino que se incorporó al equipo de la Universidad de New Hampshire donde en dos temporadas disputó 67 partidos y se fue hasta los 74 puntos, unos registros interesantes que le abrieron las puertas de los Philadelphia Phantoms de la AHL en la 2008-2009 participando en 7 partidos y sumando 2 puntos.
El debut de Van Riemsdyk llegó en la 2009/2010 y realmente fue un buen debut ya que el jugador de New Jersey se fue hasta los 78 partidos defendiendo la casaca de los Flyers de Philadelphia en los que logró 35 puntos. Al siguiente curso disputó menos partidos, 75, pero alcanzó los 40 puntos. Aunque su carrera se vio frenada por las lesiones y la temporada siguiente apenas pudo disputar 43 partidos. En junio de 2012 fue intercambiado con los Maple Leafs de Toronto por el defensa Luke Schenn. Todavía renqueante de sus problemas físicos, su primer curso en la franquicia canadiense lo solventó con 48 partidos jugados y 32 puntos.
Su segundo año en los Leafs fue más positivo, alcanzó los 80 partidos y se fue a los 61 puntos logrando 30 goles y 31 asistencias, sus segundos mejores registros en estos apartados. Precisamente con los de Toronto logró su mejor temporada goleadora hasta la fecha al anotar 36 goles en la temporada 2017-2018. También en Toronto consiguió su mejor cifra de puntos gracias a los 62 que firmó en la campaña 2016-2017, año en el que logró 33 asistencias, su mejor registro. Entre medias quedó la temporada 2015-2016 en la que apenas participó en 40 partidos debido a una lesión que le impidió acabar la temporada.
En la temporada 2018-2019 se incorporó de nuevo a los Philadelphia Flyers donde jugó con cierta regularidad, incluyendo 61 partidos en la 22-23 antes de irse a los Boston Bruins con los que disputó 71 encuentros en la campaña 23-24. En todos estos cursos firmó unos números bastante decentes, no en vano en la 2022-23 hizo 29 puntos en los 61 partidos que disputó, mientras que la temporada con Boston hizo 38 puntos en 71 partidos.
En la 2024-25 firmó con a los Columbus Blue Jackets, con quienes pretende seguir alargando su historia, que no es que sea de las más brillantes de la competición pero que es la de alguien que cuando las lesiones le han respetado ha cumplido con creces. En definitiva, la historia del amigo de Patrick Kane.
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