La historia de la NHL ha estado marcada por un claro dominio de los jugadores canadienses, incluso en las mejores plantillas de los equipos estadounidenses por lo general los que llevaban la batuta del equipo eran los nacidos en el país de la hoja de arce, pero todo esto parece que está cambiando. Actualmente hay siete franquicias ubicadas en el gran norte, Canadá, y como si el mundo se hubiera girado al revés, la gran mayoría de ellas tienen en común el tener a jugadores estadounidenses ocupando lugares de mucha importancia entre sus respectivos rosters.
Toronto Maple Leafs
El equipo de Ontario tiene solamente a cuatro jugadores estadounidenses entre sus filas pero dos de ellos ocupan unos roles muy destacados, el primero sería Auston Matthews, el de Arizona es uno de los mejores jugadores de toda la NHL y en este presente curso ha sido el primero en llegar a los 40 goles anotados, en definitiva, la cara visible de la franquicia.
El segundo sería Jack Campbell, portero titular de los Leafs y encargado máximo de mantener la portería lo más lejos posible de la polémica, algo difícil con una prensa de Toronto muy encima del equipo.
Montreal Canadiens
Los Quebecois tienen hasta ocho americanos en nómina, de estos dos son especialmente importantes. Por un lado está Cole Caufield, el joven delantero es una de las grandes promesas del hockey estadounidense además de ser una de las esperanzas de los Habs de cara aun futuro a medio/largo plazo. Después estaría Jeff Petry, el defensa es ya un veterano de la liga pero sigue siendo uno de los defensores más destacados de la retaguardia de Montreal.
Winnipeg Jets
Los de Manitoba poseen nueve jugadores nacidos en el país de las barras y estrellas, tres de ellos son de suma importancia para el equipo. Blake Wheeler aparece primero como el capitán, además de este inmenso rol también es uno de los puntales ofensivos del equipo. Seguidamente está Kyle Connor, el delantero se está marcando un año extraordinario a nivel ofensivo, el mejor en esta faceta del equipo.
Y por último pero no menos destacado, está Connor Hellebuyck, el arquero de titular de los Jets y uno de los mejores guardametas de toda la liga.
Vancouver Canucks
Los Canucks tienen seis estadounidenses en su roster, pero casi en su mayoría son de una valúa muy grande. El primero sería J.T. Miller, el delantero está cosechando un curso espectacular siendo uno de los mejores puntuadores de toda la NHL. Después aparecería Quinn Hughes, uno de los mejores defensores jóvenes de la liga, el cuál debe aportar muchas alegrías a la franquicia de la Columbia británica.
En portería estaría Thatcher Demko, una de las grandes promesas (ya realidad) del hockey norteamericano bajo tubos, para terminar irían dos delanteros de suma calidad, Brock Boeser y Conor Garland.
Calgary Flames
Seis norteamericanos forman parte de los Flames, de todos ellos, dos son auténticos puntales del conjunto de Alberta. Primero aparecería la máxima estrella y auténtico portento ofensivo del equipo, Johnny Gaudreau, el de Nueva Jersey está cursando una temporada al nivel de los mejores de la liga. Después también estaría Matthew Tkachuk, baluarte de Calgary y pieza indispensable para afrontar el futuro con garantías.
Un poco más lejos de los dos mencionados estaría Blake Coleman, notable delantero en varias facetas del equipo.
Ottawa Senators
Hasta siete estadounidenses componen la plantilla de los Sens pero sin ninguna duda uno es el más destacado, se trata de Brady Tkachuk, actual capitán de la franquicia capitalina canadiense y uno de los estandartes del equipo. Menos destacado a día de hoy pero de suma importancia de cara al futuro, se trataría de Shane Pinto, delantero de 21 años y con mucha calidad en sus manos.
Edmonton Oilers
Los Oilers serían la excepción que confirma la regla, en su caso solamente tiene a tres estadounidenses (Yamamoto es el más importante) en plantilla y ninguno de ellos ocupa un lugar destacado entre el escalafón en importancia del equipo, el cuál este sí, sigue dominado por jugadores canadienses y un alemán.