Un año antes, los Minnesota Wild seguían atravesando las dificultades que conlleva ser un equipo de expansión y terminaron últimos en la división Noroeste con 73 puntos, 21 detrás de los Vancouver Canucks por el octavo y último puesto de playoff en el Oeste. Mientras Doug Risebrough, director general, y Jacques Lemaire, primer entrenador, aún intentaban encontrar las piezas correctas, Marian Gaborik dio un paso adelante y explotó para anotar 30 goles.
En verano, Risebrough incorporó a un center veterano en la figura de Cliff Ronning a cambio de una selección de cuarta ronda. Bill Muckalt, ex delantero de los Ottawa Senators, también firmó un contrato plurianual con el equipo.
La campaña 2002/03 en el Xcel Energy Center no pudo empezar mejor y los Wild registraron 6-1-1 en sus primeros 8 encuentros. La bola de nieve siguió rodando a partir de ahí y el club jugó con más seguridad. Lemaire fue capaz de construir un estilo que frustraba a los rivales. Su mente privilegiada mantenía a Minnesota cerca en el resultado de partidos que eventualmente ganaba.
Los Wild desplegaron finalmente aquel esquema defensivo que Lemaire había utilizado en Nueva Jersey. Además, pudieron apoyarse más tanto en Dwayne Roloson como en Manny Fernandez en la portería. Ambos se repartieron el tiempo bajo palos y terminaron con 23 y 19 victorias, respectivamente.
Minnesota empezó a codearse con los mejores equipos y la franquicia empezó a ganarse su respeto. Los Wild empezaron a formarse la identidad de ser un rival duro con su defensa y precisa anotación. El equipo, respaldado por la ciudad, se clasificó a las eliminatorias como sexto cabeza de serie. Era la primera vez que el Estado del Hockey experimentaría la postemporada desde la 1991/92 con los Minnesota North Stars.
Los Wild desplegaron finalmente aquel esquema defensivo que Lemaire había utilizado en Nueva Jersey
Gaborik continuó su buena forma goleadora con otro curso de 30 tantos, pero esta vez se le unió Pascal Dupuis y sus 20 goles. Ronning demostró ser el pívot que el equipo buscaba y se apuntó 17 tantos y 31 asistencias. Andrew Brunette registró 18 goles y 28 asistencias para continuar con su crecimiento.
Gaborik y Brunette extendieron su acierto en la temporada regular a las eliminatorias. El extremo diestro checo lideró al equipo con siete tantos y seis asistencias en la parte decisiva de la campaña. Wes Walz, pese a no ser un anotador prolífico, escribió los mismos números. Sergei Zholtok repartió 11 asistencias y Filip Kuba fue el defensa más incisivo con tres goles y 5 asistencias.
No se esperaba que los Wild ganaran muchos partidos en los playoffs, pero sorprendieron al mundo del hockey al batir a los Colorado Avalanche, terceros cabezas de serie, en la prórroga del séptimo partido. Minnesota perdía la serie de primera ronda por 3 partidos a 1, pero ganó el sexto y el definitivo en el tiempo extra.
Los Wild remontaron un 3-1 abajo de nuevo en las semifinales de conferencia y vencieron a los Canucks, cuartos cabezas de serie. Minnesota marcó 16 goles en los últimos tres duelos para robar la serie.
La racha tocó a su fin a manos de los Mighty Ducks of Anaheim, que barrieron a los Wild en cuatro partidos seguidos en la final de la Conferencia Oeste. New Jersey terminó ganando la que fue su tercera Stanley Cup.
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