El hockey femenino viene siendo dominado claramente por los combinados nacionales de Canadá y Estados Unidos, es verdad que otras selecciones empiezan a aportar talento de un gran calibre, pero la realidad es que a día de hoy las dos potencias norteamericanas siguen reinando ellas solas de forma paritaria.
La prueba de ello es fácilmente comprobante con un rápido vistazo al casillero de medallas, sean los JJOO de invierno, los mundiales anuales de la IIHF o la 4 Nations Cup. En la cita olímpica, de las siete ediciones disputadas en seis ocasiones se han visto las caras por el oro, en el mundial anual de la IIHF han sido 21 de 22 posibles finales mientras que en la 4 Nations Cup la cifra se sitúa en 21 de 23 posibles contiendas finales.
Esto es un reflejo claro el cuál muestra el inmenso potencial y dominio (al menos en el pasado y en la actualidad) de ambos países entorno al hockey femenino respecto a sus rivales europeas y del resto del globo. Es cierto que poco a poco otros combinados nacionales van acercándose lentamente al nivel de las norteamericanas, pudiendo competir de una forma menos desnivelada que antaño, pero aún así a la hora de la verdad las medallas de oro y plata acaban en la mayoría de los casos en los mismos cuellos.
Nacen las Rivalry Series
En 2018 las federaciones canadiense (Hockey Canada) y estadounidense (USA Hockey) llegarían a un acuerdo para empezar a jugar entre ambas selecciones femeninas en un nuevo «campo de batalla» a partir de 2019, dicho torneo consistiría en una serie de tres choques repartidos entre ambos países. El objetivo buscaba con mucho acierto la promoción de dicha rivalidad en suelo norteamericano, dado que la mayoría de competiciones internacionales se disputaban muy a menudo en Europa o Asia, de esta forma la promoción del hockey femenino encontraría otro gran escenario, ahora en «casa».
La primera edición (2018/19) caería en manos de las canadienses al imponerse 2 a 1 en el global de las series, los encuentros se jugarían en London (Ontario), Toronto y Detroit.
Pabellón | Ciudad | Resultado |
---|---|---|
Budweiser Gardens | London, Ontario | CAN 0-1 USA |
Scotiabank Arena | Toronto, Ontario | CANADA 4-3 USA |
Little Caesars Arena | Detroit, Michigan | USA 0-2 CAN |
Para la edición de 2019/20, las series se expandirían hasta los cinco encuentros, tres en suelo canadiense y dos en el estadounidense. El combinado de EEUU se llevaría las series por un global de 4 a 1, incluyendo el partido final en el Honda Center de Anaheim (hogar de los Anaheim Ducks de la NHL) ante 13,320 espectadores, record para el hockey femenino en territorio estadounidense.
Pabellón | Ciudad | Resultado |
---|---|---|
XL Center | Hartford, Connecticut | USA 4-1 CAN |
Avenir Centre | Moncton, N.B. | CAN 1-2 USA |
Save-On-Foods Memorial Centre | Victoria, B.C. | CAN 2-3 USA (OT) |
Rogers Arena | Vancouver, B.C. | CAN 1-3 USA |
Honda Center | Anaheim, California | USA 4-3 CAN (OT) |
La siguiente edición (2022/23) viviría un impase de un par de años coincidiendo con la pandemia mundial de Coronavirus, esta vez la competición anual (en principio) se alargaría hasta los siete duelos, pudiendo así visitar más ciudades norteamericanas. A diferencia de la anterior ocasión, las canadienses se llevarían el gato al agua y se impondrían por un global de 4 a 3 a sus rivales del sur.
Pabellón | Ciudad | Resultado |
---|---|---|
Prospera Place | Kelowna, B.C | CAN 3-4 USA (SO) |
Sandman Centre | Kamloops, B.C. | CAN 1-2 USA |
Climate Pledge Arena | Seattle, Washington | USA 4-2 CAN |
The Dollar Loan Center | Henderson, Nevada | USA 2-3 CAN |
Crypto.com Arena | Los Angeles, California | USA 2-3 CAN (OT) |
Colisée Vidéotron | Trois-Rivières, Quebec | CAN 5-1 USA |
Place Bell | Laval, Quebec | CAN 5-0 USA |
La edición de 2023/24 ya está en marcha, de nuevo contará con siete localizaciones repartidas entre Canadá y Estados Unidos para el disfrute de los aficionados/as en general. Abajo tenéis a vuestra disposición los mejores momentos del partido inaugural que cayó de las manos de las estadounidenses.
La exitosa idea de enfrentar a las mejores jugadoras (de EEUU y Canadá) de hockey del planeta enfundadas en sus respectivos uniformes nacionales se ha convertido en un auténtico fenómeno ahí donde las Rivalry Cup deciden «pararse», ayudando de forma exponencial a la mejora y crecimiento del hockey hielo femenino en suelo norteamericano, dando la posibilidad a las más jóvenes jugadoras de ver de cerca a sus ídolas y poder seguirlas como referentes de una forma más continuada y próxima.